Hemos recibido con profundo pesar la noticia de que un ataque terrorista, dirigido a una ceremonia de conmemoración en Kabul, ocasionó la pérdida de vidas de muchos hermanos afganos y dejó a muchos otros heridos.

Además, nos entristece profundamente el hecho de que muchos soldados y policías afganos hayan sido martirizados debido a otro ataque en la provincia de Takhar.

Condenamos estos atroces ataques terroristas. Deseamos la misericordia de Dios para aquellos que perdieron su vida, hacemos votos por una pronta recuperación de los heridos y transmitimos nuestras condolencias al Gobierno de Afganistán y al pueblo hermano afgano.